La Tiendita de Slayer

El lado B de la elección: los votos en TV

Algo le encuentro a estos "eventos nacionales", que me hacen estar pegados a la tele. Me pasa, al menos, una vez al año, ya sea con las 27 horas de "amor" de la Teletón, o con las 18 horas de "tensión" de las elecciones. Sea una, u otra cosa, ahí estoy yo, viendo al cobertura en vivo de los canales de TV. Pero sin duda, mi favorita son las elecciones. Aunque los canales estén en todas las ciudades, y despliegen sus estudios virtuales y toda la tecnología de punta, es gracias a los abnegados periodistas, y sus chascarros en pantalla, que hacen que este no sea el domingo más fome del año.

Todo empezó a las 8 de la mañana. La mañana democrática es lo más aburrido de todo el proceso. "¿Primera vez que es vocal de mesa?", "como se están constituyendo las mesas por alla en el Local X", "en esta mesa todavia no llega ningún vocal", y cosas por el estilo, se repiten una y otra vez -en los mismos locales año tras año- en un rapido zaping por los 4 canales nacionales que le dieron full cobertura a esas votaciones - Red TV, como siempre, programó informerciales "shame sha" a esas horas, como parte de su programación alternativa-. Pero temprano en la mañana, ya empiezan los chascarros. TVN -que por cierto, ¿quién fué el creativo de ponerle "11/D" a la cobertura especial?- tenía una bella toma aerea desde el estadio nacional, cuando se fué a negro. "Parece que se nos cayó el helicoptero" dijo Juan José Lavín..."No, sólo se nos cayó la señal y no el helicoptero, gracias a Dios", dijo Gustavo Huerta desde las alturas...Mientras, Veronica Smidth, en el estudio virtual, pegaba unoa y otra vez sobre la madera de los pupitres parlamentarios para mostrarnos que estos no eran, precisamente, virtuales.

En Mega, Mauricio Israel le da tal sensación de relajo y liviandad al asunto, que hasta los periodistas en terreno se toman ciertas licencias. Un jóven, apoderado de mesa, fué llamado por el Jefe de Local de este recinto para suplir a un vocal ausente. Según el periodista, éste le habría dicho: "Compadrito, venga para acá y sientese aca en esta silla, o se me va para la Capacha no más". Un periodista que ya se lo quisiera La Cuarta. Mientras, en el 13, Bachelet tomaba desayuno con sus hijos para todo Chile. Sinceramente: ¿A quien le importa que la hija de Bachelet coma tostadas con mantequilla en la mañana?.

En la tarde, se vive una falta de información terrible. Tanto, que los canales no tienen con que rellenar. Si no hubiera sido por los chistes de Bombo Fica, el programa de TVN hubiera naufragado. Y en el 13, elegían a la "Miss Voto" ¿?. Mención Honrosa para Rec en CHV, que recordando los mismos videos añejos que repiten una y otra vez los miercoles en la noche, al menos sacó risas. Lo mismo para Copano y sus noticias.

Y aquí viene lo más entretenido: el conteo de votos. Ver como los apoderados de tiran de las mechas por que la raya vertical estaba o no sobre la horizontal, es simplemente impagable. Por eso, digo No al voto electrónico. Y por fin, el momento más esperado del día, llega: un impecable Jorge Correa Sutíl empieza con la ceremonia del boletín electoral. Claro que deberían cambiar el discurso, porque frases como "de los votos válidamente emitidos, esto es, excluyendo nulos y blancos" ya las sabemos de memoria. Pero vimos caras nuevas en el Diego Portales. Monica Rincón reemplazó a Patricia Espejo, después de que ya pensaba que Espejo invernaba ahi entre una elección y otra. Ahora, no se que pensarán los directores de los diferentes programas, pero se las arreglaban para apretujar hasta 4 imagenes distintas al mismo tiempo en el televisor. Como si uno tuviera 4 ojos para alcanzar a verlas todas...

Luego, los contactos en directo con los comandos: todos no quieren cantar victoria ni asumir una derrota todavia, pero a la vez, todos saben lo que irá a pasar al final del día. Canal 13 se anotó un poroto al salir de los estudios: habian buenas tomas de Hoffmann con La Moneda de fondo...aunque se le volaran los papeles a cada rato.

Lavín reconociendo la derrota y abrazando a Piñera, Bachelet completamente sóla leyendo el discruso en el Hotel San Francisco, y Hirsch encerrado en su comando para ver a donde tira los votos en segunda vuelta fueron los últimos hechos políticos del día. Así se nos fué otra elección. Habrá que esperar hasta el 15 de enero, para saber si otra vez le tiran monedas a Longeira, o si otra vez le tiran agua a Lily Pérez. Nadie puede decir que el domingo eleccionario chileno es el domingo más fome del año.