La Tiendita de Slayer

Milano

Cuando llegué a Milán, andaba un poco aturdido. Claro, nos habian dado desayuno recien en el avión, y ya nos bajabamos en Malpensa a las 4 p.m. No sabía si era mañana, tarde, hora de almuerzo....pero daba lo mismo, total, ya estaba en Italia. Y ahí nos esperaba un viejito sacado de esas películas como La Vida es Bella, con boina y lentes gruesos. Se llamaba Leonardo, un autentico lombardo. Y era el que nos iba a dar el tour por Milán. También nos esperaba Giovanni, el chofer (que allá se les llama "autista") del bus de ultima generación que nos iba a pasear por toda Italia. Asi que partimos no mas a la ciudad, harto distante del aeropuerto. Y nada de ir al hotel a descansar un rato, a recorrer Milano al tiro no mas. Asi que pasamos por los lugares mas turisticos, como:

Castello Sforzesco















Teatro Alla Scala





Galleria Vittorio Emanuelle II



Duomo di Milano

Eso si, a esas horas, en Italia ya está todo cerrado, así que ninguna de esas cosas pudimos verlas por dentro, excepto la Gallería, que lo que más me llamó la atención, es que hay un McDonald en el centro...hasta adonde ha llegado Ronald!. Y de ahí, vino el tremendo viaje al hotel, y digo tremendo no porque estuviera lejos, sino porque el hotel estaba en un callejón en donde no podia pasar el bus, asi que Giovanni dió como mil vueltas por todo Milán para entrar por el otro lado, y tampoco se podía....y como ya estabamos entero chatos, nos dejó en la calle no mas.

Fué en esta ciudad donde comí una de las mejores pizzas durante todo el viaje, la famosa Pizza Margherita. Las hacía un tal Luigi, que no entendía ni español ni ingles, y nosotros no hablabamos italiano. Pero justo un ecuatoriano que vivía por ahi nos ayudó a pedir las famosas pizzas. Y eso fué todo Milán, porque al otro día habia que levantarse con las gallinas para ir a Roma, y eso lo dejo para otro dia...